QF 26
Auckland, New Zealand 5.15 am Martes, Septiembre 12, 2006
Mexicali, 10.15 am Lunes, Septiembre 11, 2006
Estaba cansado cuando subí al avión, es la verdad. Todo mundo me preguntaba, ¿ya pensaste lo que vas a hacer en las 13 horas de vuelo?
-No, supongo que seguiré leyendo Life After God de Douglas Coupland. (Un regalo de Sylvia Vidrio, la mejor roomie del mundo)
Entonces, a bordo del vuelo QF 26 de Qantas lo primero que noto es:
1. El espacio entre los asientos es muy reducido maldita sea!!
2. Cada asiento tiene su propia mini-pantalla LCD, sweet!!
Se escucha el anuncio del piloto con su acento australiano: Bienvenidos a este vuelo de 13 horas, en algunos minutos serviremos la comida y antes de llegar a Auckland les daremos desayuno, yeah!!!
Entonces, cada asiento tiene su pantalla y un control remoto que se convierte en control de videojuegos, como esos que venden los chinos en el Price Center de Calexico. Tienes la opción de escuchar el radio, ver TV/películas o jugar videojuegos con gráficos tipo SNES.
Antes de servir la comida, tal como lo había indicado el capitán, las sexy aeromozas australianas repartieron un menú para la comida y el desayuno. El menú incluía bebidas alcohólicas… y sí, eran gratis. Dios bendiga a Qantas.
Cuando la aeromoza se acerca con el carrito pregunta: Pollo o Pasta.
Luis: - Pasta y una Victoria Bitter Beer por favor. (Buena Ocasión para empezar a disfrutar la cerveza australiana).
La comida estuvo rica, la cerveza también. Al más puro estilo de la cerveza oscura tradicional, compárese con la XX Ambar.
Después de ahí, jugar ajedrez un poco en la pantalla. Ver la película Poseidón de Wolfgang Petersen. Dormir 9 horas.
El vuelo fue bastante placentero, comer, pistear, dormir, despertar y desayuno. Amén.
Mexicali, 10.15 am Lunes, Septiembre 11, 2006
Estaba cansado cuando subí al avión, es la verdad. Todo mundo me preguntaba, ¿ya pensaste lo que vas a hacer en las 13 horas de vuelo?
-No, supongo que seguiré leyendo Life After God de Douglas Coupland. (Un regalo de Sylvia Vidrio, la mejor roomie del mundo)
Entonces, a bordo del vuelo QF 26 de Qantas lo primero que noto es:
1. El espacio entre los asientos es muy reducido maldita sea!!
2. Cada asiento tiene su propia mini-pantalla LCD, sweet!!
Se escucha el anuncio del piloto con su acento australiano: Bienvenidos a este vuelo de 13 horas, en algunos minutos serviremos la comida y antes de llegar a Auckland les daremos desayuno, yeah!!!
Entonces, cada asiento tiene su pantalla y un control remoto que se convierte en control de videojuegos, como esos que venden los chinos en el Price Center de Calexico. Tienes la opción de escuchar el radio, ver TV/películas o jugar videojuegos con gráficos tipo SNES.
Antes de servir la comida, tal como lo había indicado el capitán, las sexy aeromozas australianas repartieron un menú para la comida y el desayuno. El menú incluía bebidas alcohólicas… y sí, eran gratis. Dios bendiga a Qantas.
Cuando la aeromoza se acerca con el carrito pregunta: Pollo o Pasta.
Luis: - Pasta y una Victoria Bitter Beer por favor. (Buena Ocasión para empezar a disfrutar la cerveza australiana).
La comida estuvo rica, la cerveza también. Al más puro estilo de la cerveza oscura tradicional, compárese con la XX Ambar.
Después de ahí, jugar ajedrez un poco en la pantalla. Ver la película Poseidón de Wolfgang Petersen. Dormir 9 horas.
El vuelo fue bastante placentero, comer, pistear, dormir, despertar y desayuno. Amén.
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