Flashback: Skydive

[este es el post número 100 en la historia de este blog]


Queenstown, New Zealand, September 26, 2006

Cuando éramos niños todos soñamos con volar. De acuerdo a las leyes de la gravedad esto no es posible, pero la sensación más cercana es tirarte de paracaídas y de verdad es increíble.


Pocas cosas en la vida son tan intensas como aventarte de una avioneta en pleno vuelo a 12, 000 pies de altura, con la confianza plena en que tu instructor te ha sujetado lo suficientemente bien para que no mueras durante la aventura (tal vez estoy siendo un poco fatalista).


La puerta de la avioneta se abre, te apoyas en el borde y al siguiente segundo ya estás flotando entre las nubes. La velocidad se siente al máximo, tus mejillas se congelan y tus oídos se tapan... tu corazón está emocionado y tus ojos no son capaces de abrirse aún más para poderlo capturar todo.


Sigues cayendo y luego se abre el paracaídas grande, sientes un jalón hacia arriba y cada vez caes más lento. El paisaje se aclara y la experiencia dura lo suficiente como para poder exprimir cada segundo.


Yo sólo quería tirarme del bungy y lo hice. Blanca Nieves me acompañó y después de que ambos brincamos del puente no se esforzó mucho para convencerme de que me tirara del paracaídas.


Siempre estaré agradecido... estuvo poca madre.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Mezcal Canastudo

Daniela Chi

Mezcal y Tamales (Puebla, 02FEB13)