Don Porfirio

Hace unas horas platiqué con un viejo conocido, Don Porfirio. Un albañil de 60 años que no sabe leer ni escribir, y que en realidad tiene problemas para aprender a hacerlo.

Lo conocí porque se supone que yo debía alfabetizarlo, como parte de mi Servicio Militar. Pero decidí que era más interesante escuchar sus historias que enseñarlo a leer.

De tal manera que en lugar de repasar las vocales cada vez que lo veía (dos veces por semana), platicar con él se convirtió en una experiencia rara. ¿Por qué? Don Porfirio tiene problemas del habla y dificultades para aprender, y a veces es difícil seguirle la conversación. Me acostumbré a su forma de hablar después de un tiempo.

Primero, me habló de su natal Nayarit y de las niñas de 13 años que se quitan la ropa en los congales de su pueblo. Después, me invitó a acompañarlo a su tierra. Dijo que podía hospedarme en su casa, -Puedes quedarte conmigo. Tengo televisión y un radio que toca CDs. Respondí que no podía, ya que tengo compromisos en la escuela y en la radio.

A la siguiente semana, hablamos de política. -Allá en Acaponeta, el PRI regala una torta y un refresco en los mítines. El PAN también regala comida para que votes por ellos. Pero el candidato del PRD, que es amigo de nosotros nos dijo: Coman con el PRI y con el PAN, pero voten por mí.

En sus pláticas, Don Porfirio siempre describía a Acaponeta, Nayarit como el mejor lugar sobre la tierra. Ahí siempre hay pescado barato, puedes comer rico con veinte pesos, tiene su casa de dos pisos, y por supuesto, hay mujeres muy lindas.

Entonces, Don Porfirio, -le dije. ¿Qué diablos hace en Mexicali si se la pasa quejándose del calor y de lo caro que está todo? Él respondió, es que aquí está mi hermana. -¿Y? -Es que aquí está mi hermana. __Esa conversación no tenía futuro.

La última plática que tuve con Don Porfirio inició con un reclamo. -Hey, no fuiste conmigo a Nayarit. -Don Porfirio, le dije que no podía. -Hey, no fuiste conmigo. Los reclamos duraron varios minutos. Don Porfirio no es una persona en la totalidad de sus facultades mentales y generalmente repite las cosas varias veces, uno debe tenerle paciencia.

Don Porfirio nos contó al hombre mayor que cuida la puerta del DIF y a mí, que había seguido a una de las muchachas que trabajan ahí para invitarla a Acaponeta. -Entonces toqué la puerta de su casa y ella salió con un short muy cortito. Le dije que la conocía y que si no quería ir conmigo a Acaponeta. Ella no quiso.

- Don Porfirio, ¿la siguió hasta su casa para preguntarle si quería ir con usted a Nayarit?
- Sí. Le dije que la llevaba a trabajar conmigo vendiendo tacos de pescado. Que yo le pagaba el pasaje del carro. {Así le llama Don Porfirio al camión.} Pero ella no quiso ir.
- Claro que no va a querer ir con usted. ¿Por qué habría de hacerlo?
- Porque Acaponeta es muy bonito.

Acompáñame en diciembre, me dijo, puedes ir conmigo a pescar tiburones.

Debo decir que me agrada la idea de pasar un tiempo siendo pescador, podría servir de experiencia para cuando viva en la casa a la orilla del mar, ¿verdad Merchant?

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Mezcal Canastudo

Daniela Chi

Mezcal y Tamales (Puebla, 02FEB13)